sábado, 20 de febrero de 2016

Deadpool


Tal y como sospechaba, Deadpool no sólo es una comedia salvaje, de ésas que no dan tregua (si vas a mear te perderás una media de tres chistes), y una buena película de acción, sino que también es una perfecta traslación cinematográfica del personaje visto y leído en viñetas.

Creo que es científicamente imposible aburrirse con esta película. Deadpool, el personaje, es tal y como debe ser: un cachondo que no cierra la boca, que suelta palabrotas como una metralleta, que rompe la cuarta pared para dirigirse al público y que es tan adicto a matar como a la cultura pop.
La incorrección política está presente en casi todo el metraje, y bienvenida sea. En estos aburridos y mojigatos tiempos, donde hay que meditar mucho antes de abrir la boca para que evitar que te tachen de racista, machista, nazi o mala gente, se agradece que alguien mande al carajo toda esa rancia y absurda formalidad.

También me ha gustado muchísimo la selección musical y el uso de ésta. Todo lo que sea emplear canciones de los 60, 70 y 80 es ganarse mi corazón.

Otro punto a destacar son los créditos, tanto los iniciales como los finales. Creo que debería haber alguna ley que obligase a todas las películas a tener, como mínimo, una buena secuencia de créditos inicial o final... O ambas, qué cojones.

Deadpool es una de esas escasas películas comerciales hechas con sumo cariño hacia el material original y hacia el fan, porque la peli podrá gustar a un público que ante todo esté libre de prejuicios y sepa que no va presenciar una obra maestra, sino un 100 minutos de sano y necesario entretenimiento puro y sin pretensiones, pero por encima de todo es un regalo para los fans del cómic.
Al igual que ocurría con Fury Road, el guión se puede resumir en un par de líneas, pero en este tipo de casos lo importante es el viaje y no el destino.

Ryan Reynolds inmenso, con y sin disfraz. Es un actor que nunca me ha dicho gran cosa, y  sin embargo aquí se nota que está en su salsa, en un papel hecho por completo a su medida y de su agrado.
En cuanto al resto del reparto, no destaca nadie más excepto Gina Carano (para mal, porque es una actriz horrible), Morena Baccarin por su innegable química con Ryan Reynolds y T. J. Miller por básicamente lo mismo.


Sobre el equipo que forman Deadpool, Negasonic y Coloso, la chispa salta en cuanto se juntan, igual que en las buenas buddy movies, lo cual hace que me pregunte cómo habría sido esta película en manos de un tipo como Shane Black.
Coloso es un puñetero roba escenas encantador, y Negasonic una típica adolescente que, por alguna razón, me ha caído bien. Pese a la relativa poca presencia en pantalla de ambos personajes, terminan luciéndose y haciendo un hueco en la memoria del espectador.

Otro punto que me gustaría señalar, aunque en realidad no tenga demasiado que ver con la película, es que de nuevo y al igual que ocurrió con títulos como Kick-Ass, buena parte del público ha entrado en las salas de Deadpool con una bochornosa desinformación a sus espaldas, tal y como he podido comprobar tras leer ciertos comentarios vertidos en diversos foros y redes sociales. Me refiero a esos padres que han llevado con ellos a sus hijos pensando que se trataba de una película Marvel en la línea de las demás, pero también lo digo por algunos adultos, aburridos borrachines de corrección política y mojigatería, que han salido horrorizados y escandalizados de la sala ante semejante festival de groserías, violencia, chistes guarros y referencias a la cultura pop que ni siquiera han entendido.
Donde quiero llegar es a que no cuesta nada informarse antes de entrar a ver una película, especialmente si se trata de un material tan especial como Deadpool, que ni mucho menos es para todos los públicos… y no hablo de edades. Si haces los deberes antes de ir al cine o, por qué no, te lees un par de tebeos para saber de qué va la cosa y sacar conclusiones sobre si te interesa o no dicha película, puedes ahorrarte un mal trago y algunos euros; lo que no me parece válido es ir a lo loco y luego quejarte de que la película no es lo que esperabas. El espectador debe ser consecuente y responsable  de saber dónde se mete (porque eso de que el cliente siempre tiene la razón es mentira. Los nueve años que llevo trabajando de cara al público corroboran esto que digo), ya que después no vale culpar al cine o a la propia película, y menos en la actualidad, donde uno puede informarse de lo que sea con tan sólo googlear un par de minutos.
En el cómic ya está todo lo que aparece en la película, de modo que los que critican Deadpool por ser “extraña”, malhablada, sangrienta, violenta y grosera están poniéndola a parir por ser una buena adaptación. Tócate los cojones.

 El cine de superhéroes, debido a sus grandes presupuestos, se ve obligado a llegar al mayor número posible de espectadores. Es lógico. Pero sin duda se agradecen títulos como Deadpool o la serie de Daredevil. Es necesario que entre tanto producto para todos los públicos haya algunos exclusivos para adultos, del mismo modo que también resultan imprescindibles cositas como Guardianes de la Galaxia o Ant-Man, que pese a estar dentro de lo apto para todas las edades, se alejan de la oscuridad, el drama, la seriedad y la rectitud de títulos más "gordos" y pretenciosos como Batman VS Superman o Civil War, ofreciendo un entretenimiento ligero, eficaz y riquísimo. 
Ya que el mercado está saturado de superhéroes, lo mínimo que pueden hacer los estudios es variar el tono y la franja de edad de vez en cuando. Es la única forma de romper la monotonía y no cansarse, porque hasta de helado se puede uno hartar si nunca cambia de sabor.

En fin, lo único que puedo recriminarle a esta película es que no dure 20 minutos más y que la secuela no se estrene la semana que viene. 

Sin duda, Deadpool pasa a entrar en mi Top de las películas más divertidas y políticamente incorrectas que he visto en mi vida. 

4 comentarios:

  1. Todo lo que leo es a este nivel... Espero que las expectativas no me arruinen el disfrute, aunque por lo dicho acá creo que no va a ser posible...

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    1. Yo diría que, como mínimo, te lo vas a pasar MUY BIEN :)

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  2. En Estados Unidos una madre hizo una petición para que se estrenara una versión de Deadpool para mayores de trece años! Nadie le hizo caso, pero tiemblo en pensar si al final Ryan Reynolds y los guionistas no se hubieran impuesto y el estudio hubiese insistido en hacer la película PG-13 (esta es una de las razones por las que tardó tanto en llegar a los cines esta peli, al final se arregló ya que la película tiene un presupuesto relativamente bajo para lo que es una peli de superhéroes -de ahí los chistes por no poder permitirse más X-men-). Aparte de lo que ya comenté en mi crítica, Deadpool también me gustó pq es de esas pelis que cuando las vuelves a ver descubres cosas que no viste la primera vez.

    La desinformación e incultura que mencionas también hace que me pregunte cuánta gente hoy día aquí pilla que la secuencia poscréditos es una referencia a Todo en un día, por ejemplo. Creo que la película podría aguantar sin entender tooodas las referencias, pero es lo que le otorga personalidad, creo.

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    1. El tema de esa madre lo leí hace algún tiempo y me pareció la hostia. La señora quiere que el mundo se adapte a su hijo y no al revés jaja Si la película es para mayores de 18 y tu hijo tiene 13, pues al chico le va a tocar esperar un poco antes de poder verla, no hay más. Lo que no puede pretenderse (y esto lo digo más que nada por los grandes estudios) es adaptar historias adultas para que se conviertan en películas familiares. Cada película tiene su público, y cambiar eso es destrozarla.

      Sobre lo otro que mencionas, doy por hecho que al menos aquí en España, muy pocos van a pillar el grueso de las referencias y bromas.

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