miércoles, 6 de abril de 2011

Los sopranos

Llevo tiempo con la mosca detrás de la oreja. ¿Qué pasa con los guionistas de cine? ¿Por qué desde hace años han perdido la chispa y la originalidad? Creo tener la respuesta, y es muy sencilla; se han pasado a la televisión. A las series de televisión, concretamente. Últimamente es en este sector donde se encuentras las ideas más frescas y originales, las mejores interpretaciones, los mejores trabajos de dirección, etc.
Un ejemplo de serie sobresaliente en todos los aspectos es Los Sopranos. Una obra maestra que ayer mismo terminé de ver, dejándome con esa sensación de, por un lado, alegría, pues me ha gustado muchísimo, y por otro lado, tristeza, porque se ha terminado y sé que no va a haber más. Mejor así, seguro.


A lo largo de seis temporadas, que se pasan en un santiamén, seguimos las vivencias de la familia Soprano, centrándose especialmente en el cabeza de familia, Tony Soprano, genialmente interpretado por James Gandolfini.
Tony es el arquetipo de mafioso de hoy en día, como los que retrató Scorsese en Uno de los nuestros. El mafioso humano, con vida más allá de los crímenes, con preocupaciones, debilidades, meteduras de pata…
Esto se puede aplicar a todos los personajes, ya que la serie está planteada desde un punto de vista realista, donde, por ejemplo, cualquier personaje puede morir en el episodio que sea.

La trama nos brinda momentos de angustia, de tensión, de humor… incluso algún momento que hará que se nos salté las lágrimas. Esto se consigue gracias a una serie de personajes que, por mucho que se dediquen al mundo de crimen, no dejan de ser humanos.
El guión de la serie es impecable y misterioso, cosa que me encanta. Hay varios enigmas que quedan en el aire, como la obsesión de Poli con el número 3, la aparición de La Virgen María, o el episodio en el que Tony Soprano se va a Las Vegas, consume peyote y grita “Ahora lo sé” al amanecer, en el desierto. ¿Qué sabe? Nunca lo sabremos.
Pero es normal que haya altibajos. Con muchos capítulos nos darán ganas de aplaudir y saltar de la silla, y con otros nos quedaremos como el que se toma un café.
También es cierto que la serie tiene muchas escenas violentas, algunas de ellas realmente crudas, lo que hace que Los Sopranos se le pueda atragantar a algún espectador especialmente sensible.

Otro elemento casi constante en la serie es el mundo onírico. Los sueños están muy presentes y, de hecho, hay un par de capítulos que transcurren casi en su totalidad dentro de un sueño.
Y si hablamos de misterios no podemos olvidar el final. Para algunos, una basura. Para otros, una genialidad absoluta. Yo, personalmente, no creo que sea ni una cosa ni otra.
Es un final algo cobarde a mi parecer. David Chase (el creador de la serie) no quiso pillarse los dedos y dejó que el espectador sacara sus conclusiones. Pero por otra parte me gustan los finales de este tipo, sin explicaciones, sin darlo todo mascadito, así que no me quejo.
¿Mi teoría? Tony Soprano muere, pero esto no es un spoiler, tranquilos. Como ya he dicho, el final está pensado para que cada uno saque sus conclusiones, así que, en cierto modo, no existe un final.

Las apariciones de actores famosos como Steve Buscemi, Lauren Bacall, Ben Kingsley o la cantante Nancy Sinatra entre otros, y una gran banda sonora con un repertorio impresionante de canciones no hacen otra cosa que engrandecer a esta serie que revolucionó la televisión casi tanto como la mítica Twin Peaks, de la que ya hablaré en otro momento.

9 comentarios:

  1. Esta serie me atrae y me repele a partes iguales. De siempre he leído muy buenas críticas acerca de ella y, como seriéfila, me gustaría verla porque está empezando a catalogarse dentro de los clásicos, pero claro, soy bastante sensible a según qué escenas y no sé si mi pobre estómago podrá aguantarlas. De todas maneras, gracias por la recomendación ;-)

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  2. Esuchan, yo creo que tendrias que darle una oportunidad. Sé de sobra que a ti lo que te incomoda es el gore, y de eso no tiene Los Sopranos. Hay violencia y algo de sangre (aún no he visto a nadie a quien le salga flores y duendes de una herida de bala), pero nada de gore explícito.

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  3. Yo no he visto ni un capítulo de esta serie.
    Llevo tiempo queriéndome hacer con ella pero siempre antepongo otras cosas.
    Lo que dices de que los guionistas buenos ahora están en TV, en parte, es verdad. Digo en parte porque guionistas buenos hay y ha habido siempre en TV y en cine, pero parece que en los últimos años se han dado cuenta de que la TV permite hacer cosas que en el cine no se pueden hacer y lo quieren explotar.
    Y en cuanto a Twin Peaks, me parece cojonuda.

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  4. De Los Soprano no diré nada, pq es como decir que La Gioconda es una bella pintura.

    De lo que comentas al principio, diría que cuando dices "cine" te refieres exclusivamente al cine de gran presupuesto de Hollywood, porque en el cine independiente, la serie B y el cine europeo se han hecho películas originales y muy buenas.

    El problema tiene su origen en los ejecutivos de los grandes estudios que veían como cada vez se hacía más y más caro hacer una gran superproducción, así que los estudios preferían no arriesgar e invertir sobre seguro (no tiene nada que ver con los guionistas). Aparte, las series se dieron cuenta de que podían aprovechar el formato para desarrollar personajes y reciclar temas cinematográficos para hacer cosas interesantes, algo que habían iniciado Expediente X y Buffy, cazavampiros, y antes Twin Peaks y antes El prisionero o Rumbo a lo desconocido. No sólo eso, también desarrollar arcos en cada temporada, en lugar de hacer historias más o menos autoconclusivas.

    Sin embargo, debido a la crisis creativa del cine de principios del XX y el desarrollo de series, el cine de Hollywood ha tomado nota y desde hará unos cuatro/cinco años han empezado a salir de la decadencia. Y con el éxito de El caballero oscuro y Origen de Nolan, Hollywood ha empezado a ver que el éxito económico no está reñido con cierto riesgo con lo cual se está recuperando.

    Lo que coincide con cierta decadencia por parte de las seres de TV, con las cadenas obsesionadas en crear el próximo Perdidos o el próximo fenómeno televisivo, y lo hacen reciclando conceptos muy clásicos (como Fringe), ya que como dijo Gaudí, para ser original hay que ir al origen.

    Todo esto ilustra que tanto el cine, como la televisión, como la literatura o los cómics se mueve por ciclos, de brillantez-decadencia-brillantez. Como la mediocre década de los 90 en los cómics que ha sido seguida de una excelente época cargada de grandes obras.

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  5. Einer, te digo igual que a Esuchan. Dale una oportunidad, aunque sea a la primera temporada.

    Raül, por supuesto que me referia a los guionistas de cine comercial. Del cine independiente o de serie B no tengo ninguna queja, pero el cine comercial... tópicos, tópicos, tópicos. Me da bastante pereza.

    Sobre lo que dices de los ejecutivos que apuestan sobre seguro, no estoy totalmente de acuerdo. Se puede invertir una gran suma de dinero en una serie de tv y que esta fracase. No considero a la TV como un medio seguro para el éxito de un producto.

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  6. Me refería a que los ejecutivos de los grandes estudios prefieren apostar sobre seguro en el cine haciendo películas tópicas y repitiendo fórmulas ya gastadas, no de la TV (que también hay). Esta política de no arriesgarse provocó el cansancio del público y que bajara el número de espectadores (más que por las descargas de internet). Sin embargo, si ves algún documental sobre series, clásicas o recientes, hay varios casos de series que por la interferencia del canal o por la censura de ese canal acabó provocando el fracaso de una serie o que esta no se hiciera o que cambiara de cadena (como Futurama que vuelve a emitirse gracias a su marcha de la Fox).

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  7. Hace ya algún tiempo que me atreví con el piloto y me suena que vi el segundo capítulo o puede que a miedas, me imagino que mejora. ¿Realmente despega la serie en el tercero o cuarto? Me pareció una propuesta interesante pero es que series para ver hay a patadas.

    Hombrel, me imagino que si es una serie de HBO es cierta garantía de calidad, pero como siempre digo, no me fío de la gente que dice que les gusta porque si o por el rollo Mafia. Cietamente, por ejemplo la temática de "A dos metros bajo tierra" no me atraia inicialmente y he acabao rendido a ella como el seriazo que es.

    Saludos.

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  8. Se estraña esta serie, igual que se extrañará la de Mad Men, ambas escritas por Matthew Weiner, aunque él escribió las dos últimas de los sopranos. Creo que es una serie completa, con matices buenos y malos.

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    1. La verdad es que, mirando los Sopranos en perspectiva, no consigo encontrar ni un solo matiz malo. Para mí es perfecta :D

      Un saludo!

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