lunes, 5 de diciembre de 2011

Muerto el 4 de julio


El dúo William Lustig y Larry Cohen (director y guionista, respectivamente), que ya nos regalaron ese clásico de culto que es Maniac Cop, volvieron a las andadas en 1997 con un slasher completamente desfasado y en una época en la que no encajaba, titulado Muerto el 4 de julio.
La primera vez que vi esta película fue en Antena 3, hace ya muchos años, en un programa que emitían una vez a la semana de madrugada y en el que ponían películas de terror bastante malas. Nunca había escuchado hablar de Muerto el 4 de julio, ni por aquella época sabía quien diablos era William Lustig, pero lo que si sé es que la película en cuestión me pareció un bodrio infumable. 
Años después (esta misma tarde, concretamente), quise revisar este curioso slasher, y la verdad, ha mejorado muchísimo, aunque técnicamente hablando siga siendo una basura.

Lo primero que llama la atención de esta película es que va más allá del típico slasher en el que un psicópata enmascarado se dedica a asesinar a todo bicho viviente. Durante todo el metraje se hace una clara sátira hacía el patriotismo extremo, además de enviar un mensaje antibelicista directo y contundente. 


El argumento trata sobre un militar que muere accidentalmente en combate eliminado por su propio ejército. Esto provoca la resurrección de Sam, que saldrá de la tumba invadido por una sed de venganza que sólo saciará asesinando a cualquier persona que dé señales del más mínimo antipatriotismo y que no actúe como un buen ciudadano americano. 

La película no destaca especialmente en ningún aspecto y, posiblemente, si le quitásemos el elemento satírico y caricaturesco del guión, perdería el poco fuelle que de por sí tiene, pero gracias a la nada sutil crítica que hace, Muerto el 4 de julio se convierte en una curiosa y entretenida película de terror que, imagino, no debió gustar demasiado al gobierno americano. 
Eso si, los asesinatos que lleva a cabo Sam son de lo más imaginativos, y van desde empalar con una bandera americana, hasta volar por los aires a un político corrupto a base de fuegos artificiales. 
No es una película que recomiende a todo el mundo porque, a decir verdad, es bastante mala, pero a mí personalmente me parece un filme sin pretensiones que da lo que ofrece y no aburre. No hay que pedir mucho más a este tipo de cine.

En el reparto encontramos varios rostros conocidos, como a Isaac Hayes, Robert Forster o Bo Hopkins.

5 comentarios:

  1. Creo que también vi esa película en el mismo programa de Antena 3. No me dejó ninguna impresión, positiva o negativa, aparte de reencontrarme con una madura P. J. Soles que en las pelis que sale de joven me hacía perder la cabeza. Tal vez la repase una tarde aburrida.

    ResponderEliminar
  2. Raül, igual con un segundo visionado le encuentras algo más de chicha.
    Evidentemente, esta película no podría marcar un antes y un después, ni nada parecido, pero para los amantes más completistas del género slasher es una buena opción para pasar un rato entretenido.

    ResponderEliminar
  3. Si, como mínimo pasarás un rato entretenido ;)

    ResponderEliminar
  4. RE: Pero creo q la de The Burning Moon es muy gore para mí, lo paso bastante mal, no he podido ni ver el trailer entero así q con eso te lo digo to xDD Y la de Nekromantik me gustó, pero es muy enfermiza xD

    ResponderEliminar

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...